A pesar de que ya se había anunciado una reapertura del sector turismo en todo el país, desde el 12 de octubre pasado, el área de Santa Catalina, provincia de Veraguas, se vio afectado por nuevas medidas restrictivas por nuevos contagios, lo que insidió directamente en el turismo que se mueve en ese área de playa.
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Dado esto, la Cámara de Turismo de Veraguas, en conjunto con su homóloga de Santa Catalina, solicitó una reunión con las autoridades competentes en busca de una salida a esta situación, solicitud que fue acogida por el mismo ministro de Salud, Luis Francisco Sucre, con quien sostuvieron una reunión por intervención de la Autoridad de Turismo de Panamá ATP.
En esta reunión, en la que también estuvo presente la subadministradora de la ATP, Denise Guillén, se solicitó la reapertura de los sectores turísticos de San Francisco y Soná, a más tardar este 1 de diciembre, pues las afectaciones económicas están perjudicando a los empresarios por motivo de las cancelaciones y cierres de empresas como hoteles, restaurantes y otras actividades de turismo.
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Esta solicitud fue acogida, por lo que se procederá a la reapertura de toda actividad turística desde el martes 1 de diciembre.
Irónicamente, después de nueve meses cerrados, al fin le permitieron la reapertura al final de octubre, pero el 2 de noviembre llegaron las tormentas y se cierran las playas. Luego viene el cierre de Soná cabecera por el aumento de casos de COVID-19.
Es preciso mencionar que Santa Catalina tiene cero contagios y los comerciantes afirman estar preparados para recibir a los turistas y dar curso a la reactivación económica del área.
El cierre por el COVID-19 afectó a todas las playas del Sur de Veraguas, tales como Arrimadero, playa Banco, Pixbae, Mariato, el golfo de Montijo y otros.